Uno puede dar muchos argumentos para estar en contra o a favor de los toros, pero lo que es inadmisible es la postura de Montilla:
"He votado en contra de la prohibición porque creo en la libertad"
En ella lo que se demuestra es la falta de cultura democrática de este país (que no se escandaliza ante esta declaración) y lo que es peor, del propio President de la Generalitat.
Si de verdad Montilla piensa que la prohibición atenta contra la Libertad debería votar todo el grupo socialista en contra, y de forma imperativa, porque la democracia no significa que la mayoría impone sus deseos. La democracia es un medio para garantizar la libertad, es una herramienta, no un fin en sí mismo. En otras palabras, la dictadura de las mayorías NO es democracia. Una mayoría no tiene legitimidad para prohibir algo a una minoría, por muy minoritaria que sea.
Si Montilla de verdad cree en la Libertad, el imperativo democrático es defender esa libertad contra toda mayoría autoritaria.
Un Parlamento, por más mayoría que lo vote, no es democrático si aprueba la sumisión de la esposa al marido, o la obligación de profesar la religión católica, porque eso atenta contra las libertades individuales de personas, y sobre eso no es legítimo que legisle ninguna mayoría.
La libertad no es algo que se pueda someter a un "voto de conciencia". Es algo que se ha de defender de forma incondicional.
1 comentario:
Entonces, como Montilla ha dicho que cree en la libertad, según tú habría que haber tenido que actuar en consecuencia y obligar a todo su partido a votar lo que el dijera, porque la propuesta, llevada al parlamento gracias al número de firmas y debatida durante días antes de votarla, es totalitaria y absolutista porque lo opinas tú.
¿Sabes tú realmente de qué va la democracia?
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